La relación directa entre reputación y resultadosEscrito por Alejandro Abascal el 30/03/2022 a las 20:20:352593
(CEO Remove) Prestigiosas publicaciones como Forbes o Brand Finance, reconocen como el valor de los intangibles ya supone, en algunos sectores, el 80% del valor total de las empresas. El último GIFT (siglas de Global Intangible Finance Tracker, estudio de referencia de monetización de intangibles) cifra en 40 billones de dólares el valor que aportan la reputación, la confianza, la marca o la transparencia a las compañías. Si nos centramos en España, en marzo de 2020 Brand Finance lanzaba su informe España 100, sobre las marcas más valiosas y fuertes en nuestro país. En el estudio, empresas como Santander, Zara, Repsol, BBVA o Paradores copaban los puestos más altos, en coherencia con los resultados financieros de esas compañías que se están conociendo actualmente. Buena parte del éxito intangible de estas compañías tiene su origen en la gestión de la reputación que sus CEOs están realizando desde hace unos años tanto de su visión personal como de liderazgo.
Internet se ha convertido en la gran caja de Pandora que todo lo recuerda y lo almacena, tanto lo verdadero como lo falso. Lo actual y lo pasado. Como consumidores debemos defendernos ante noticias, o todo tipo de publicaciones que se muestran en Internet, además de proteger y gestionar la información que pudiera ser perjudicial, y que, apareciendo en Internet, pudiera afectar a nuestra imagen, ya seamos una empresa o una persona física. Actualmente, el 91% de las personas que compran o venden algún bien o servicio consultan en internet información sobre esa adquisición. Vivimos en plena economía digital, la reputación online es un activo que ya no se puede dejar a la deriva y que afecta directamente a la rentabilidad empresarial
Muchos son los beneficios de internet y las redes sociales, entre otros, te ayuda en la búsqueda de nuevas oportunidades profesionales y te mantiene en contacto con gente que está lejos. Sin embargo, en su cara menos amable, se convierte en una vía para propagar información falsa o para difamar, a una velocidad casi incontrolable
Una de las derivadas negativas de este uso es el acoso cibernético: ciberbullyng, sextorsión, grooming, ciber violencia de género, sexting, son los más habituales hoy en día. Todos ellos implican una humillación o vejación de una persona a otra más vulnerable. Una vez tiene lugar alguna de estas situaciones son penadas por la ley igual que si ocurrieran fuera del entorno digital, con sus multas y penas de cárcel correspondiente. Lo malo es que a diferencia del acoso en la vida fuera de las TIC, sobre todo el ciberbullyng o la ciber violencia de género, este no acaba cuando llegas a casa, sino que puede seguir las 24horas del día a través de los dispositivos que tenemos todos al alcance de la mano. Me parece importante insistir en este punto sobre la importancia de la pedagogía. Es recomendable no compartir imágenes personales y a ser posible utilizar seudónimos, no responder a una provocación si persisten, guardar pruebas y denunciarlo a quien sea pertinente: padres, profesores, policía.
Este tipo de sucesos no solo afectará a la víctima en el momento que ocurra sino también en el futuro. Su imagen podría haberse visto afectada, aun habiendo sido la víctima y esto, sobra decir, es injusto. La reputación online puede afectar negativamente a la estabilidad
laboral o a las relaciones sociales, pilares de la vida, y, por lo tanto, hay que buscar la solución.
Estos últimos años de pandemia y restricciones, donde el uso de la tecnología se ha visto incrementado de manera exponencial, han dejado mayor evidencia de que la reputación en Internet es algo que nos puede llegar a afectar a todos: desde a un funcionario a un emprendedor; desde un pequeño negocio de fontanería a una multinacional.
Alejandro Abascal CEO Remove Group Cuidamos de tu reputación digital Noticias Relacionadas:Contra la piratería Tercera edición del premio UPF empren (UPF Emprende) a la iniciativa empresarial |