La identidad vuelve en la hoja de ruta de la dirección de las empresasEscrito por Albert Solana el 17/09/2019 a las 19:40:294152
(Product Manager en Validated ID) Se avecina trabajo y es recomendable introducirlo en nuestra hoja de ruta cuanto antes. La dirección de las empresas debe afrontar la próxima evolución tecnológica de los datos, una que tiene que ver menos con la tecnología y más con la filosofía y la confianza entre entes. Hablamos de la gestión de la identidad descentralizada o bien, también denominada, la identidad auto-soberana (SSI, en sus siglas en inglés).
Reconozcámoslo, los datos de cliente de una sola compañía son solo datos parciales del perfil digital de una persona. Podemos saber mucho sobre su perfil inversor y de comportamiento financiero, pero no sabemos nada sobre sus hábitos de salud o sus relaciones sociales. Es por ello, que es preciso colaborar con otras empresas para obtener un perfil más completo para entender quién es nuestro cliente y por tanto, poder ofrecer un mayor valor para el cliente, tal y como vemos actualmente con la ventaja competitiva que aprovechan las empresas de datos.
No obstante, ahora las reglas de juego son otras: los datos son de los usuarios, no desean intermediarios y ya están empezando a reclamar un rol activo en la gestión de sus datos, siendo más conscientes de la privacidad y vulnerabilidad de seguridad de su perfil digital. Las nuevas leyes europeas ponen la base y los incesantes escándalos de fuga y venta pública de datos sensibles de clientes, solo hace que poner el foco en la importancia de la correcta gestión de la identidad, seguridad y privacidad de los datos de los usuarios.
En el contexto de la identidad, la soluciones SSI permiten que un usuario gestione sus propias credenciales que le identifican, tal y como ahora usamos los documentos físicos que tienen atributos sobre nosotros (DNI, carné de conducir, carné de estudiante, diplomas universitarios, etc.), pero, en este caso, ocurre en el espacio digital logrando una mayor agilidad y seguridad, preservando el marco de confianza, en cualquier proceso con la administración, las empresas e incluso entre personas.
Existen varios factores que hacen renacer viejas soluciones de identidad. Por un lado, el auge en el uso de la tecnología blockchain, que permite el registro inmutable y la trazabilidad de las transacciones y que opera de facto en un mundo descentralizado. Por otro lado, estamos ante la inminente nueva explosión de cantidades de datos de los objetos conectados (IoT) y el despliegue de la red 5G, que requerirá la identificación de estos dispositivos tanto desde un punto de vista técnico como legal para asignar la propiedad de uso y gestión de los mismos. Además, tal y como apuntábamos, ha crecido la conciencia y preocupación de los usuarios por privacidad y las nuevas leyes aprobadas van en esta dirección. Y por último, no habría que olvidar el papel que tienen las empresas por la ética (o no ética) en el uso y manejo de los datos.
Todo ello hace que vuelvan a retomarse debates sobre la identidad y que las soluciones SSI estén más en boga que nunca, promovidas por organizaciones de carácter mundial trabajando en definir los estándares de identidad, tales como el DIF, Sovrin Foundation, Alastria o INATBA, con eventos clave como RWOT, IIW, EIC o KNOW, organismos públicos dedicando recursos a estas nuevas iniciativas, como por ejemplo la Comisión Europea con iniciativas como la EBSI (European Blockchain Services Infrastructure) y empresas tanto de nueva creación como viejas conocidas que están contribuyendo a aportar soluciones reales al mercado: Evernym, uPort, Jolocom, Microsoft, y Validated ID, entre otras más.
Es por tanto, más necesario que nunca, que los departamentos de Tecnología promuevan el debate en sus comités de dirección aportando un plan para dar solución a las inminentes exigencias del mercado.
Una propuesta de identidad efectiva tendría múltiples beneficios. En primer lugar, aporta valor a los usuarios al sentirse escuchados generando una mayor confianza en la relación. Y sobre todo, contribuye al negocio al agilizar los procesos de onboarding de nuevos clientes, tener trazabilidad de sus clientes online-offline, reducir costes de quejas de clientes al facilitar todos los procesos de autenticación y al facilitar la compartición de datos entre departamentos y entre otras empresas, mejorando al mismo tiempo la reputación e imagen de marca.
Septiembre, después de las vacaciones, es un buen mes para empezar a preparar la hoja de ruta del próximo año. Pongámonos ya a trabajar para que el debate sobre la identidad esté presente en todos los comités.
Albert Solana es Product Manager en Validated ID, donde está desarrolla nuestra solución de Self-Sovereign Identity, VIDchain, y trabaja para que sea compatible con las tecnologías emergentes. Antes de eso, es también especialista en generar valorar para las personas, empresas y la sociedad, con tecnología y tiene una experiencia de más de 15 años en proyectos de firma digital y análisis de datos. Ha estudiado Ingeniería Informática en la FIB-UPC (Barcelona), y tiene un MBA de ESADE Business School (Barcelona) y Stern NYU (NYC). |