Actualizado el 23/04/2024

icon Facebook icon Twiiter icon RSS icon EMAIL
  1. Portada
  2. >
  3. Editoriales
  4. >
  5. La desinformación enquistada

La desinformación enquistada

Escrito por Tecnonews el 27/09/2022 a las 21:42:58
1169

La desinformación y su modo de propagación más efectivo, el online, se han enquistado en nuestros sistemas políticos. Así lo demuestran las últimas elecciones que ha ganado la ultraderechista Giorgia Meloni.

 

Ya antes de los comicios, Euronews advirtió de la propagación de los bulos por internet. En este caso dos partidos populistas y amantes de las teorías de la conspiración, Vita y Italexit difundieron un bulo en el cual se afirmaba que los votos por correo estaban siendo manipulados para que no todos los partidos pudiesen ser escogidos. No todos los partidos, es decir, sus partidos.

 

Al mismo tiempo, también corrieron noticias sobre el hecho de que los resultados de las elecciones serían –en futuro, es decir, nada había pasado- amañado. Se trata de dos tipos de mentiras que no son propiedad intelectual de los italianos. Ya en otras latitudes como en Estados Unidos, corrió el mismo bulo cuando Trump perdió las elecciones. De hecho, las mentiras en internet son tan internacionales como la misma red lo es.  

 

Y el problema es que no estamos hablando de un problema desconocido. Ciertamente, hace unos años a uno le podía pillar desprevenido. Bolsonaro, Trump, Abascal o los partidarios del Brexit pudieron pillar a pie cambiado a los medios de comunicación y a las mismas redes sociales. Sin embargo, años después no podemos decir que no sepamos cómo se transmite la desinformación. ¿Por qué sigue sucediendo? Según el periodista de eldiario.es, Carlos del Castillo, las redes sociales no saben exactamente cómo actuar ante este tipo de situaciones y no tienen mecanismos para combatirlas.

 

Por otro lado, los medios de comunicación, que han entrado en la misma lógica que las redes sociales, comparten desinformación de un modo salvaje, pese a que después quieran dárselas de adalides de la pureza informativa.

 

Sea como sea no hay preparación para acabar con una desinformación que, desgraciadamente, está ya ligada a la política.