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¿Porqué los ciudadanos están desafectos de los políticos?

Escrito por Carles Vivas el 23/10/2012 a las 20:26:13
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(Consultor)

Se han producido recientemente una serie de acciones y manifestaciones más o menos espontaneas y especialmente nuevas, en las que los manifestados, no son violentos, no son los marginados, los anti sistema (aunque luego se apunten a la juerga). Algo está pasando que nos lleva a los ciudadanos a cuestionarnos los principios básicos de la convivencia política. Algunas manifestaciones se dirigen al congreso de los diputados para decirles “que no nos representan”.  He querido meditar por lo que nos lleva a estas situaciones y aunque no pretendo ser exhaustivo y dejando de lado temas que afectan muy directamente a personas que se han quedado sin empleo y sin desempleo, pienso que hay algunos parámetros –seguro que hay muchos más-  que quiero exponer en este articulo de opinión.

 

POCA PREPARACION PARA GESTIONAR CRISIS

 

Creo que la crisis que estamos viviendo en estos momentos tiene muchas singularidades respecto a otras anteriores y no es momento de repasarlas ahora, pero si hay un aspecto que no lo he visto reflejado: EN ESTA OCASION LOS CIUDADANOS SE ENTERARON DE LA CRISIS ANTES QUE LOS POLITICOS. Tradicionalmente he visto que los gobiernos han tomado medidas (normalmente keynesianas) al detectar incremento de la inflación o prever mayores gastos. Es lo que paso, por ejemplo en 1992 después de los JJOO y la Expo de Sevilla.  Se aumentaron impuestos, incluso con carácter retroactivo –no quiero dar ideas- alertaron de la situación, pero los ciudadanos continuaron gastando alegremente durante al menos 9 meses más y la inflación siguió subiendo. No era consciente el ciudadano que había que apretarse el cinturón, pero sí lo era el gobierno.

En esta ocasión, el gobierno estuvo negando que había (incluso que venía) una crisis, pero los ciudadanos ya eran conscientes de que la situación no era soportable, El gobierno se empeño en negarlo. Yo creo que los ciudadanos exigen de sus gobernantes, que sepan mejor que ellos, como se tiene que prevenir una situación dolorosa, porque tienen más información, pero parece que no tienen suficiente preparación. Parece que mientras hay dinero en la caja, se puede seguir gastando alegremente.

 

 

APRENDER DE LAS SITUACIONES DIFICILES

 

De todas las experiencias de la vida se puede aprender. El conocimiento y la sabiduría se alimentan de los errores. Pero no estoy seguro que aprendamos las lecciones. No veo,  en este momento, a ningún político con una libreta apuntando lo que nunca más se debe hacer:

·         De ser más prudentes

·         De no gastarnos más de lo que tenemos

·         De que quien la haga que la pague

·         De no comprometer imposibles y pasar “la pelota” al que venga después

·         De aprovechar los momentos de expansión para ahorrar y guardarlo cuando haga falta. O haya una catástrofe.

Perdone mi atrevimiento, pero a mí me enseñaron que las cosas no se compran a plazos. Excepto la vivienda, claro. Que si uno tiene un capricho, primero ahorra y cuando  tiene el dinero se lo gasta. No puedo comprender que una familia pueda hacerse un presupuesto anual, con la discusión de si tiene que tener un déficit del 5 o el 10% de los ingresos. Pues eso es lo que hacen nuestros administradores.

 

LA POLITICA COMO PROFESION Y PRIVILEGIOS INJUSTIFICADOS

 

Yo creía, porque así lo decían en sus campañas políticas, que los que se presentaban voluntariamente a la política, lo hacían con el objetivo de sacrificarse y servir a los ciudadanos. En un mundo cada vez más laico, di la bienvenida a estos  sacrificados que venían a servir a los ciudadanos.  Debo decir que hay algunos que efectivamente, son personas honestas,  entran en la política, aportan sus ideas y su trabajo durante una legislatura y regresan a su trabajo de origen. Pero para una gran parte, la política se ha convertido en su profesión y como estos puestos de trabajo dependen de ellos mismos, pues nadie se atreve a meter la tijera. Que no me refiero a los salarios- que por cierto,  se lo fijan ellos mismos sin preguntar a sus electores-, pero cuando se le suman los abundantes privilegios y gastos ocultos (viajes, dietas,  premio por asistir a plenos, es decir por ir a su trabajo, etc.) y como el número de políticos es muy elevado, el total es impresionante. En momentos como estos sobran todos los coches oficiales y sus conductores, simplemente porque se está duplicando el servicio. ¿O es que no hay coches dignos con conductores preparados disponibles cuando hagan falta sin tenerlos en nomina? Son fáciles de identificar, porque todos ellos llevan un letrero que los identifica: Pone TAXI. No se puede escudar siempre en la “seguridad” para seguir disfrutando de privilegios, como las salas de autoridades (yo las he conocido y ya puede tener usted tarjetas oro o platino y pensar que la sala VIP es para gente de su status. Una sala de autoridades es otro mundo mucho más selecto y sobre todo mucho más caro). Claro, cuando alguien prometía trabajar por el “Estado de bienestar” y explora estos privilegios acaba pensando “que bien se está aquí”. Y se queda.

No podemos tener ni pagar tantos niveles de administración con tantos funcionarios y tantos políticos profesionales en tantos parlamentos. Este coste está también en el déficit y de la deuda, y es también por ello que nos tendrán que rescatar. No podemos  seguir pagando todas estas estructuras políticas ineficientes. Solo he oído algún político en campaña que promete reducir el número de parlamentarios en su parlamento. Oiga, si estaba en el poder, ¿por qué no lo ha hecho? Mejor dicho, políticos en el poder: ¿Por qué no lo hacen ya? Si es excepcional  la situación y se ha tenido que subir el IVA, hasta de los “chuches”,  también se puede decidir mañana “suspender” el senado, reducir el  Congreso a la mitad, y los parlamentos autonómicos. Eso se puede hacer de un día a otro y nadie sale perjudicado. Excepto claro los propios políticos.

 

REPRESENTATIVIDAD

 

Hemos convertido las democracias en Partidocracia. Aquí los que mandan no son los diputados que hemos elegido, sino la cúspide politica del partido. Si quieres ser diputado tienes que conseguir el favor del Secretario General que hace las listas. Y entrar en los mejores puestos. Los ciudadanos no te conocen (en la mayoría de los casos), pero sí el que te pone y te garantiza que vas a salir. Es decir LISTAS ABIERTAS y que cada uno se gane ser diputado. Sabría usted decir como se llaman el numero dos y tres de la candidatura que usted votó la última vez. Pues en muchos casos son decenas los que han entrado detrás de un cartel electoral con una foto.

Esto nos lleva a anular la capacidad de opinión y representación de los diputados. Tienen que seguir las consignas del portavoz en las votaciones (un dedo SI, dos dedos, NO, tres dedos ABSTENCION, ¿lo ha visto usted alguna vez?), pues con los portavoces, hay bastante.

Yo no entiendo que se contrate a ninguna persona en ninguna empresa sin presentar un Curriculum Vitae, con los datos personales, una foto, los estudios finalizados, los idiomas que habla, la experiencia profesional adquirida lo largo de la vida, logros conseguidos en sus puestos de trabajo gracias a su intervención.  Pues esto no nos lo dan los que quieren que les “contratemos”. Del único que acabamos sabiendo algo es del cabeza de lista, pero tampoco tenemos toda la información. Y muchos de ellos no se atreverían a poner los idiomas que hablan –y eso que todos presumimos que estamos en Europa- Y cuál es la experiencia profesional, en otras etapas de la vida, en la educación, en la empresa, en la administración. Sabríamos valorar en base a la experiencia PROFESIONAL Y EMPRESARIAL, cual es la capacidad que tiene para afrontar y resolver problemas complejos.

 

COMPROMISOS

 

Estamos entrando en tiempos de campaña electoral. Vamos a escuchar en los próximos días un montón de promesas inconcretas y una larga lista de deseos (que no objetivos) que satisfagan a cualquiera que escuche. Mire, yo quiero que me diga 4 o 5 objetivos concretos,  no más, que los pueda recordar de memoria, con acciones concretas y tiempo para conseguirlo. Como ocurre en cualquier empresa. ¿Y qué pasa en la empresa  si no lo consigues? Pues que te echan a la calle.  En el mundo político, se promete, no se cumple y no pasa nada. Me gustaría que estos objetivos se sellaran y se entregaran a un notario y a un conjunto de ciudadanos y a un tribunal de cuentas (el propio parlamento no, porque son ellos mismos) que si objetivamente no han cumplido al cabo del plazo fijado, vengan obligados a dimitir de su cargo y al haber suspendido, no se puedan presentar a las próximas elecciones: No se puede permitir que pasen curso sin aprobar el examen, así que,  a repetir a las bases.

Puedo comprender que el diagnostico hecho desde fuera del poder no sea suficientemente completo y que al contrastarlo con las promesas realizadas (de forma muy alegre y para conseguir votos) haga imposible su obtención. Pues en esos casos lo más responsable y digno, es reconocer que no vas a poder hacer aquello que prometiste y en consecuencia tienes que abandonar el puesto que los ciudadanos te dieron para que lo hicieras. Y a repetir curso, para que no tengamos repetidores que además sean los delegados de la clase.

 

 

 EJEMPLARIDAD

 

Otro aspecto de la política es la ejemplaridad. Ya digo que la política no es una profesión, sino una vocación.  Una vocación como esta debe llevar aparejada una ejemplaridad que les es exigible. Un político no solo debe cumplir con la ley, faltaría más! Aunque tenemos políticos  encausados en casi todos los partidos. Además les es exigible que sean DECENTES. Es decir, no pueden hacer aquello que de ser conocido sería motivo de escándalo, aunque ningún juez te acabe condenando. Y ejemplos de ello lo tenemos en todos los sitios. Y en todos los partidos. Comisiones ilegales, desvió de caudales públicos, prevaricación,  etc. Ya sé que seguramente aceptar un traje no es ilegal, pero si es en el ejerció del poder, es INDECENTE  aceptarlo.