Los mínimos de la pirateríaEscrito por Redacción TNI el 11/07/2017 a las 17:12:002608
Cuando hablamos de piratería se hace complicado establecer un límite. ¿Poner una canción en un bar es piratería? ¿Compartir una película que previamente hemos comprado en DVD es piratería? ¿Fotocopiar un libro es piratería? Cada cual interpreta esos límites en función de su parecer (y sus intereses económicos).
Pese a esto, el siguiente caso es sin lugar a dudas un caso de piratería flagrante que al menos nos indica cual es el mínimo cuando hablamos de este concepto.
El Fiscal General de Bamberg, en el estado alemán de Baviera, ha clausurado una página web llamada Lul.to que almacenaba de forma ilegal 160.000 eBooks en alemán, otros tantos en otras lenguas y 28.000 audiolibro; todo sumado más de 200.000 títulos. Los tres dueños de la página han sido detenidos y el contenido del portal ha sido confiscado.
¿Qué hace este caso distinto a otros de los que hemos oído hablar? Un total de 30.000 usuarios estaban registrados en este portal. Los internautas debían pagar la suma de 23 céntimos de euro por cada título que quisieran obtener.
Los piratas tenían almacenada en su web, además de los libros y audiolibros, 24 bitcoins, es decir 55.000 euros, 100.000 euros en depósitos bancarios, y el juez les ha requisado 10.000 euros en efectivo.
Ésta es la gran diferencia con respecto a otros casos en los que se comparte contenido con copyright: el lucro de los propietarios de Lul.to. El lema de ésta, una de las webs con más cantidad de contenido en Alemania, era “Lee y escucha”. Los detenidos, más bien deberían haber dicho: “Lee y escucha que nosotros nos hacemos de oro”.
En resumidas cuentas, cuando un tercero se beneficia de contenidos que no ha creado sin tener en cuenta a los propios creadores, encontramos el límite de la piratería. |