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La sociedad egocéntrica

Escrito por tecnonews el 30/05/2017 a las 23:08:40
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Se dice con frecuencia que vivimos en una sociedad profundamente egocéntrica. El problema de esa idea es saber si han sido las Nuevas Tecnologías las que han permitido que eso sea así o si los seres humanos ya éramos egocéntricos antes de que la revolución tecnológica irrumpiera en nuestra vidas. No existe una respuesta clara, con todo, parece obvio que los nuevos medios de difusión y de registro, permiten lo que Andy Warhol ya vaticinó con su célebre máxima: "En el futuro, todo el mundo será famoso durante 15 minutos".

 

Actualmente podemos grabar nuestros propios vídeos y subirlos a la red donde quien quiera puede verlos. Podemos lanzar nuestras ideas al ciberespacio o colgar nuestras fotos. Por si fuera poco, los dispositivos móviles cada vez tienen más en cuenta los selfies  en sus diseños. Las tecnologías exacerban nuestra voluntad de convertirnos en el centro del mundo (al menos en el centro de nuestro mundo). Es por este motivo que ya no sorprende mucho la nueva función que está creando Google para su buscador. La opción "Personal" permitirá a los internautas buscar contenidos que tengan relación con ellos mismos y que hayan subido previamente a través de Google Fotos, Gmail o el calendario de Google. Así, si en "Personal" buscamos "coche" nos aparecerán todas las fotografías propias en las que aparece un automóvil. Podemos pensar que se trata de una función que en realidad solo quiere mejorar la eficiencia del entorno de Google, sin embargo cuando el propio usuario se convierte en el objeto de búsqueda, se invierten los roles por completo y empieza el egocentrismo.

 

No es el único ejemplo de cómo se ha desarrollado la cultura del egocentrismo en el mundo de las Nuevas Tecnologías. En un documental corto de la revista Vice sobre tecnología y el uso que hacen de ella hoy día los jóvenes, emergían algunas ideas de lo más hilarantes. Los jóvenes hacen un uso extensivo de Instagram e incluso cuando tienen que subir una fotografía a dicha red social, organizan lo que a todas luces podría parecer una sesión de fotografías. Preparación, maquillaje, descarte de fotos malas y selección de aquella foto que va a darnos más likes. Todo para obtener la máxima repercusión en las redes sociales y tener el máximo número de seguidores posibles. Una joven en el documental llega a comentar que no saldría con un chico que siguiera a más gente de la que le siguiesen a él. Es lo que la chica llama, estar en negativo.

 

Tal vez esta sociedad ególatra no es resultado de las Nuevas Tecnologías, ni tampoco está inscrita en nuestro ADN animal. Quizás las relaciones sociales están cada vez más mediatizadas por las leyes del capitalismo. Creemos que la amistad depende, como la mercancía y su valor, de la acumulación de los beneficios y la minimización de las pérdidas. Es por ello que queremos presentarnos ante el mundo como el producto perfecto: el que se vende a muchos usuarios y cuyas ganancias dependen de muy pocos.