Actualizado el 16/04/2024
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La propiedad de las institucionesEscrito por Redacción TNI el 06/06/2010 a las 22:12:151614
Esta editorial que nadie piense que está escrito en referencia a alguna persona en concreto y que tampoco nadie piense que no va por él. Las instituciones en los países democráticos tienen una manera de funcionar. Los presidentes o los Decanos o lo que sea, son votados o pueden ser votados por todo el censo electoral y son elegidos durante un periodo determinado. Al cabo de este tiempo pueden ser echados de su cargo con otra votación. Esto último es la grandeza de la democracia y no es el ser elegidos. La herramienta fácil de la que echan mano los no democráticos es la cantidad de gente que vota, sea el 10%, 50% o el 100%, sea como sea, guste o no guste la opción el valor es idéntico. No pocas veces, y en la historia de España tenemos ya bastantes ejemplos, cuando el electorado se harta de una opción, decide despertarse e ir a votar para sacar a los que están en el poder consiguiéndose, extrañamente, un alto grado de participación. Pasemos a la segunda parte. Los que salen elegidos, lo son para servir a los demás. No es algo que hayan conseguido gratuitamente en beneficio propio. Pareciera que es, en muchos casos, un trofeo personal para posicionarse profesional o socialmente. Servicio quiere decir todo. Arremangarse y dirigir la institución, representarla tanto en lo que interesa al presidente como lo que no interesa y muchas cosas fuera de los horarios convencionales. Muchos presidentes de organizaciones, sobre todo si son pequeñas y no se cobra, abandonan. Y ahora la tercera parte. Respeto a las normas democráticas. Ya se sabe que quien está en el poder tiene una cierta ventaja, pero ¿Qué difícil es ser escrupuloso con las reglas? Todo está en función de la percepción de lo que podemos perder, cuanto más sentimos que podemos perder, más difícil es ser escrupuloso. Seguro que ustedes estarán pensando en más de una institución en la que pasa esto, desde comunidades de vecinos hasta gobiernos de países. Dicho todo esto, es hora de recapacitar y elegir opciones y piensen que a pesar de todo los sistemas democráticos, son los mejores y debemos preservarlos entre todos sea cual sea la organización. |
