Actualizado el 23/04/2024

icon Facebook icon Twiiter icon RSS icon EMAIL
  1. Portada
  2. >
  3. Editoriales
  4. >
  5. La barra libre del espionaje debe terminar

La barra libre del espionaje debe terminar

Escrito por tecnonews el 03/05/2022 a las 20:11:33
1163

¿Algún día se esclarecerá el culebrón de espías que está viviendo España? ¿Se sabrá quién está detrás de las escuchas a los independentistas? ¿Quién pinchó el teléfono de Pedro Sánchez i Margarita Robles? ¿Fue Marruecos quien espió al presidente y a la ministra de Defensa? ¿Es el estado profundo quien interviene las comunicaciones de los representantes políticos democráticamente escogidos?

 

Si algo sabemos seguro es que en este nuevo capítulo del espionaje tecnológico masivo acontecido en España, se está poniendo de relieve la existencia de un mundo que nada tiene que ver con las libertades y la democracia. El ciberespionaje es una herramienta esencial de las guerras modernas que estamos viviendo y que cada vez –al menos en Europa- tienen una mayor presencia.

 

Una nueva pregunta, esta quizás con respuesta: ¿Qué solución podemos dar a todo este embrollo? Vaya por delante que descubrir la verdad no será nada sencillo. Con todo, la opereta que está viviendo el país demuestra un problema global que debería tener respuesta desde las más altas instituciones.

 

Debe ser desde Europa que se plantee poner fin al mercado libre del espionaje tecnológico. Si ha sucedido lo que ha sucedido es porque una empresa de Israel –una democracia con muchas sombras- fabrica tecnologías que pueden ser adquiridas por los estados miembros. ¿Por qué no sancionar la compra de este material bélico que es probado en contextos de guerra?

 

El problema de todo ello es que cuando los estados le cogen el gusto a utilizar tecnología punta contra sus adversarios –sean exteriores o interiores- están sentando un muy mal precedente. Ya sucedió en Estados Unidos con la guerra contra el terrorismo que terminó con millones de personas siendo escuchadas. Está pasando con periodistas cuyas comunicaciones han sido hackeadas. ¿De verdad queremos un mundo así o preferimos prescindir de las tecnologías del espionaje, sea cual sea la consecuencia?