Actualizado el 11/04/2024

icon Facebook icon Twiiter icon RSS icon EMAIL
  1. Portada
  2. >
  3. Editoriales
  4. >
  5. El principio del fin

El principio del fin

Escrito por Redacción TNI el 13/12/2011 a las 20:41:14
2830

Nuevamente  tomamos una encuesta efectuada por nuestro diario digital para reflexionar acerca de la NNTT.

Como les preguntábamos durante las últimas semanas, muchos se plantean, a día de hoy, si la TDT tiene futuro frente a lo que parece va a ser la sensación de la televisión para los próximos años: la caja tonta conectada.

Sin duda no es una pregunta baladí. Los aparatos que se disponen en el salón aún no han sido substituidos por los ordenadores. Esto  se debe al hecho de que internet ofrece contenidos audiovisuales diferenciados con respecto al medio convencional. Seguimos creyendo, tal y como afirman los estudios más recientes, que es más fiable la información de los canales de siempre que alguna aparecida en la red.

Por lo tanto parece difícil pensar que algún día desparezca la televisión convencional, es decir, algo tan nuevo como la TDT que ya se ha convertido en un dinosaurio de la modernidad.

Es muy probable que la televisión conectada no llegue a sustituir la TDT. De todos modos la pregunta en este caso queda mal formulada. Durante los últimos meses hemos observado como algunas plataformas de internet, cual Youtube, planteaban sus propias cadenas de televisiones. Es un movimiento pionero que no tardará en extenderse a otras empresas. Cabe añadir que muchos canales de televisión convencional ya tienen su homónimo en la red.

La pregunta se dibuja de nuevo: ¿Los nuevos canales de internet conjuntamente con una televisión conectada pueden borrar del mapa a la TDT? Respondemos entonces alto y claro. Sí.

Después de tanta inversión y esfuerzo en pocos años, menos de veinte a lo sumo (una eternidad para las NNTT) morirá la televisión tal y como la hemos conocido siempre.

Los canales en la TDT son muchos pero siempre serán menos que los de internet y su interactividad es limitada en comparación con las posibilidades que ofrece la red.

La siguiente pregunta, ya que estamos con este ejercicio retórico, es: ¿Cambiará nuestro método de entender la televisión?